La Última Palabra

La última palabra respecto a la validez o no de la elección del Presidente de México, realizada el 2 de julio pasado, la tuvo el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

En transmisión en vivo de CNN en español, vimos hoy martes 5 de septiembre, por la mañana (tenemos dos horas de diferencia en relación con el Distrito federal) cuando el magistrado Leonel Castillo González, declaró Presidente Electo a Felipe Calderón Hinojosa, para el periodo constitucional que se inicia el primero de diciembre del 2006 y concluye el 30 de noviembre del 2012.

“... Entréguese constancia de validez”, sentenció.

Inapelable el juicio del Tribunal. La decisión de los magistrados, a favor del dictamen, fue por unanimidad.

A favor de Felipe Calderón Hinojosa, 14’916,927 votos. A favor de Andrés Manuel López Obrador, 14’683,096. La diferencia 233,831 votos, que dio el triunfo al primero.

Hasta aquí todo está bien: El Tribunal rindió su dictamen, se aprobó y su juicio es inapelable.

Pero se puede opinar y, de seguro que habrá opiniones en contra y a favor, por montones, que en nada vendrán a cambiar el resultado, sin embargo, en mucho contribuirán para determinar cómo pueden mejorarse los futuros procesos electorales.

Sin duda serán motivo de análisis y de controversia, el que se consideró que hubo irregularidades y que, a pesar de ellas, la elección fue válida. Y, esa será la mancha que lleve el Tribunal en su historia.

Tres de las irregularidades señaladas son interesantes, con efectos que se puedan medir o no.

La principal, por la importancia del personaje, la indebida intervención del Presidente Vicente Fox Quesada, durante el proceso electoral.

La intervención del Consejo Coordinador Empresarial, presidido por José Luis Barraza, a través de propaganda difundida en medios de comunicación y que, de alguna forma afectaba al candidato de la Coalición por el Bien de Todos Andrés Manuel López Obrador.

Y, la intervención de un personaje que con sus recursos económicos logró meterse en el proceso electoral, aunque en realidad nada tuviera que hacer: Víctor González Torres.

En otras palabras, se admite que hubo suciedad en la contienda, está claro que no sólo por una de las partes, sin embargo, si afectó mucho, poco o nada, será motivo de discusión por buen tiempo, pero el dictamen fue aprobado y, el juicio, es inapelable:

Felipe Calderón Hinojosa, es Presidente Electo de México.