Seis años más

El cambio en la estructura sindical se esperaba, sin conocerse con certeza el camino a seguir para alcanzar el objetivo. Y, así fue. La maestra Elba Esther Gordillo Morales, conserva su fuerza política dentro del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, al ser electa presidenta del Consejo General Sindical para el Fortalecimiento de la Educación Pública.
Esto sucedió durante el VI Congreso Nacional Extraordinario del SNTE, celebrado del 18 al 20 de octubre, en el Hotel Barceló, en la Riviera Maya, en Quintana Roo.
El periodo, será de seis años. Al igual que el del Presidente de la República. Se inicia en 2012 y concluye en 2018.
Los comités seccionales, continuarán con un periodo de cuatro años; los delegacionales, de tres y los representantes de escuelas, de dos.
Algo causó sorpresa: Que el mencionado cuerpo colegiado, se encuentre integrado por ex secretarios generales del Comité Ejecutivo Nacional del SNTE, entre ellos, dos de Baja California que, a su vez, fueron ex secretarios generales de la Sección 37: Alberto Miranda Castro y José Luis Andrade Ibarra. Los otros ex dirigentes son, además de la propia maestra Gordillo Morales, Humberto Dávila Esquivel, Tomás Vázquez Vigil y Rafael Ochoa Guzmán.
No se puede dejar de lado mencionar que Juan Díaz de la Torre, fue ratificado en la Secretaría General del SNTE.
Sin restarle importancia a los otros temas abordados, sin duda el de la reforma estatutaria fue el que provocó más dudas, preguntas y análisis, antes de llegar a una conclusión en la mesa de trabajo.
Al final, los objetivos se alcanzaron y, de acuerdo a comentarios de delegados, la organización sindical salió fortalecida.
Algo que provocó comentarios, al menos fuera del Congreso, fue el que a la inauguración asistiera Carlos Romero Deschamps, Secretario General del Sindicato Nacional de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, reelecto en su cargo días más tarde. La asistencia del Gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo, se vio normal, tomando en consideración que era en su entidad donde se efectuaba el congreso.
Sin duda, aquello que causó más revuelo, fueron las palabras de la maestra Gordillo Morales, cuando dijo que no era sirvienta de nadie, al referirse que no ocuparía un cargo a nivel de secretaría dentro de la administración pública federal que iniciará actividades el primero de diciembre próximo. Si se analiza desde el punto de vista político, es una expresión con diversos efectos, tomando en cuenta quien lo dijo. Después, ofreció una disculpa pública por haberse expresado de esa manera.
En cuanto a los delegados de las Secciones 2 y 37 de Baja California, dos eventos provocaron sorpresa y comentarios.
El primero: Al repartirse las llaves para ocupar las habitaciones, dos nombres se mencionaron juntos: Roberto Pérez de Alva Blanco y Gregorio Carranza Hernández. ¿Coincidencia? Nadie consideró que así fuera. Se habló más bien de una estrategia para que ambos ex dirigentes de la Sección 37, que vivieron fuertes diferencias en política sindical al grado de retirarse la palabra, tuvieran la oportunidad de limar asperezas, tomando en cuenta las elecciones estatales constitucionales, a celebrarse en 2013 en Baja California y la participación que tendrá el Partido Nueva Alianza —PANAL—. En otras palabras, una señal de la maestra Gordillo Morales, de que los quiere juntos. Sin embargo, algo sucedió porque cuando Pérez de Alva Blanco llegó a ocupar la habitación, le dijeron que no era posible, porque su nombre no aparecía.
El segundo: Al ser integrando el nuevo Comité Ejecutivo Nacional del SNTE, se confirmó que Gregorio Carranza Hernández estaba dentro del Colegiado de Finanzas, cuando por unos segundos fugaces pareciera que el cargo era para la ex dirigente de la Sección 2, Irma Martínez Manríquez.
Por cierto, en el caso de Miranda Castro, Andrade Ibarra, Pérez de Alva Blanco y Carranza Hernández, fueron designados por el CEN del SNTE, para que asistieran al VI Congreso.
Y algo que hasta cierto punto no se consideró sorpresa, porque todo se puede esperar en las estrategias del SNTE, fue el cambio de sede. De Baja California, se fue a Quintana Roo. Los motivos, sobran, lo cierto es que se dio.
A pesar de que el cambio era del dominio público, no faltó la delegada que “quisiera dizque despistar” asegurando que el lugar sería Rosarito y que tenía lista su maleta para viajar al día siguiente, muy temprano. Sin duda, pretendió ser más papista que el Papa, sin pensar que sólo hace el ridículo.

Vamos ahora con los congresos seccionales en Baja California.
La inauguración del X Congreso Seccional Extraordinario de la Sección 2 y el XXIX de la Sección 37, tuvo lugar en el Centro Cultural Tijuana, el primero de octubre.
La maestra Elba Esther Gordillo Morales, entró al recinto por una puerta que no era la principal, provocando sorpresa y murmullos. Luego aplausos y personas de pie. Se dirigió a la primera fila, donde se encontraban ex dirigentes de ambas secciones.
El profesor José Alberto Martínez Carrillo, Secretario General de la Sección 37, la invitó a que se integrara al presidium, en el que, entre otras personas fue acompañada por el Secretario General de la Sección 2, Rogelio Gudiño Valenzuela y por Álvaro Mayoral Miranda, Subsecretario de Educación Básica en la entidad y representante del Gobernador José Guadalupe Osuna Millán.
Al hacer uso de la palabra, Gordillo Morales mencionó que todos los ex secretarios generales fueron invitados. Así que, si hubo ausentes, sus motivos personales tendrán.

Provocó reacciones en un buen número de rostros, cuando disculpó la ausencia de Irma Martínez Manríquez y de Roberto Pérez de Alva Blanco, además de tener palabras favorables para ambas personalidades.

 Rogelio Gudiño Valenzuela

Los trabajos de la Sección 37, se realizaron en Playas de Rosarito, en tanto que, los de la Sección 2, en Tijuana. Coinciden las descripciones en el sentido de que ambos congresos parecían ensayos de cambio de Comité Ejecutivo Seccional, por los intentos para medir fuerzas de grupos, sobre todo, al momento de seleccionar delegados al VI Congreso Nacional.
Los simpatizantes de Rogelio Gudiño Valenzuela, aseguran que ellos fueron los ganadores y que “dieron una paliza” al grupo que encabeza Irma Martínez Manríquez.
Sin embargo, quien sufrió en carne propia una derrota que le caló hasta la médula, fue Corina Ortiz Pérez. Sus detractores la describen que pasó del blanco al rojo por la sorpresa y el coraje, con lágrimas corriendo por su rostro. Ella asegura que sí le dolió la derrota, pero que fue parte de una estrategia que funcionó y, que no lloró. El suceso, provocó comentarios al por mayor. Al final, fue delegada.
En cuanto a los trabajos en las dos organizaciones, los temas más polémicos fueron: Seguridad social y calidad de vida, las demandas laborales y la reforma estatutaria. 

 

 Alberto Martínez Carrillo

Los trabajos de la Sección 37 fueron presididos por Aquiles Cortés López y Emigdio Isaac Coronado Bussani. En el plan de trabajo, el primero de ellos hizo cambios para bien, impulsando la participación de los delegados electos en asambleas delegacionales. En otras palabras, gente nueva, obteniéndose los resultados positivos esperados. El Comité Seccional, asesoró las mesas y coordinó el Congreso.
La coordinación estuvo a cargo de José Alberto Martínez Carrillo, respaldado por Rodolfo López Huerta. Este último trabajó con los integrantes del Colegiado de Organización, entre quienes se encuentran: Edgar Cíntora Castañeda, Mexicali; Ernesto Leyva Alcaraz, Valle de Mexicali; Rosalinda Salas Flores, de Ensenada, Alfonso Garibay, de Tecate—Rosarito; Miguel Ángel Melchum y María del Rosario Lizárraga Sánchez, ambos de Tijuana.
Días después, por separado Gudiño Valenzuela y Martínez Carrillo, hablaron de sus respectivos eventos.
Por cierto, Martínez Carrillo dio a conocer que en una reunión de Secretarios Generales seccionales que tuvo lugar en el Distrito Federal, fue felicitado por la maestra Gordillo Morales por el éxito del Congreso de la Sección 37, haciendo hincapié en la buena organización y la fluidez a la hora de los trabajos, lo cual permitió que Cortés López, tuviera en sus manos al día siguiente, toda la documentación respectiva: Actas, resolutivos, dictámenes e informes.
En cuanto a los nombres polémicos: Irma Martínez Manríquez, Roberto Pérez de Alva Blanco y Gregorio Carranza Hernández, se puede decir que siguen vigentes y que, ninguno de ellos se encuentra fuera de la mente de la maestra Elba Esther Gordillo Morales.